Con los ánimos alterados, en el inicio de la sesión ordinaria, el juecista Walter Nostrala pidió alterar el Orden del Día (los temas a tratar) para introducir en primer término el debate en el recinto por el fallo de la Corte Suprema de Justicia que ratifica la condena a seis años de prisión para la ex presidenta Cristina Kirchner, en base a tres declaraciones -de distinto tenor- ingresadas sobre tablas por Graciela Bisotto, Federico Alesandri y Gregorio Hernández Maqueda.
Tras idas y vueltas, y en medio del áspero choque de posiciones que alteró el arranque de la sesión, el oficialismo aceptó que se trate inmediatamente el tema en cuestión reclamado por Juntos por el Cambio. No obstante, Nostrala contragolpeó exigiendo "abran el debate" a todos. Ante un límite de oradores que puso el PJ, la bancada referenciada en Luis Juez pateó el tablero y se retiró del recinto para no retornar.
También esa demanda se escuchó de las espadas radicales, pero se diferenciaron del accionar halcón del juecismo. Los boina blanca se reincorporaron al plenario debido a dos situaciones que se dieron en el inicio caótico del plenario.
Por un lado, el PJ habilitó que sean cuatro (y no uno) los oradores por la UCR. Por otro lado, reaccionaron así a la critica anticipada del PJ de que "se quieren ir" para no aprobar el convenio entre Nación y Córdoba por la deuda de Anses con la Caja de Jubilaciones.
Las declaraciones del jefe de la bancada del PJ, Miguel Siciliano, cayeron como un baldazo de agua fría en los parlamentarios que responden a Rodrigo de Loredo. Con la guardia en alto, los radicales ordenaron su interna para no darle otra excusa al oficialismo de machacarle a la UCR el "no votar a favor de Córdoba", como pasó con el rechazo a las retenciones al campo.
Ante la dinámica legislativa, los tres proyectos (dispares entre sí) sobre el fallo de la Corte ratificando la condena a las dos veces presidenta de la Nación ingresaron en la presente sesión. Por lo tanto, para habilitar su tratamiento en el recinto debían conseguir los 2/3 de los votos del cuerpo, algo que no se logró. A renglón seguido, el oficialismo aprobó la instancia de reconsideración donde se abrió la discusión del tema. Los autores de las iniciativas y los legisladores de las otras bancadas tuvieron cinco minutos para pronunciarse.
Hasta ahí se le dio cuerda al asunto. El oficialismo, desde el vamos, había dicho que no iba haber un pronunciamiento orgánico de la Unicameral respecto a la condena firme a Fernández de Kirchner en la causa Vialidad. "No vamos a alimentar la grieta", afirmó una voz del PJ acerca de las posiciones encontradas centradas en el mileista Hernández Maqueda y el peronista K Alesandri, respecto del fallo del máximo tribunal de Justicia.
"Nada para decir respecto de un fallo de la justicia", sentenció un integrante de la bancada oficialista. Esa premisa se mantuvo a lo largo del acalorado debate por la resolución de la Corte confirmando la condena a Cristina. La oposición le enrostró "un silencio que aturde" al PJ. "LLaryora no quiere hablar de Cristina", fue la leyenda de los carteles que los opositores cambiemistas colocaron sobre sus bancas.
Como estaba previsto, el oficialismo no aportó sus votos de mayoría para emitir una declaración de la Cámara. Así se puso fin a la discusión con pases de facturas sobre la situación judicial de la ex presidenta. "¿Van a hablar del choreo de la Argentina? ¿Van hablar de que son socios del kirchnerismo?", lanzó el radical Matías Gvozdenovich, quien cuestionó el silencio del peronismo cordobés. Desde el oficialismo acusaron a los cambiemistas de montar "un circo" y "un show" electoralista.
Oposición halcón
El juecista Nostrala abrió fuego tras pegar el portazo al retirarse del recinto. "Hoy quedó demostrado que el gobernador (Martín) Llaryora es el más fiel exponente del kirchnerismo en Córdoba", lanzó. "El kirchnerismo llaryorista impidió abrir el debate libre en la Legislatura con respecto a la condena a Cristina (Kirchner) por gravísimos hechos de corrupción que pusieron de rodillas a la Argentina", afirmó el opositor duro.
"Desocupación, inflación descontrolada, pobreza e indigencia. Fiel a su estilo, intentaron silenciar las voces que los incomodan. Llaryora les prohibió a sus legisladores hablar sobre Cristina, y ellos cumplieron la exigencia mansamente", fustigó la espada de Luis Juez en la Unicameral.
Al echar sal en la herida de la grieta interna del PJ, Gvozdenovich disparó munición pesada: "No la salieron a bancar a Cristina. No la defendieron... sola una diputa nacional (por Natalia De la Sota)". "Acá se chorearon la guita del pueblo argentino. Estamos esperando que devuelvan la guita que se chorearon", cuestionó el radical al cargar contra el peronismo. "Son todos los mismos... tiene que hacerse cargo", apuntó y remarcó: "Yo festejo. No es un día triste. Festejo que devuelvan los $85 mil millones (por el decomiso ordenado por la Corte), pero ustedes están en silencio".
Para finalizar, el jefe de la bancada UCR reafirmó la crítica al advertir que el PJ cordobés "le entregó las listas al kirchnerismo en 2011 para que siga la corrupción". "Son socios del peronismo nacional", acentuó, y remató: "El gobernador es kirchnerista".
Minutos antes, en medio del clima caldeado por el fuego cruzado, Hernández Maqueda le pidió una interrupción a Gvozdenovich para meter una cuña: "¿Será que Fabián López no quieren que hablen" al hacer referencia a su pasado como secretario de la cartera de Julio De Vido. En declaraciones a Perfil Córdoba, el mileista opinó: "Llaryora la quiere libre a Cristina porque quiere quedar bien con ella. Sueña con tener su apoyo para ser precandidato a presidente por el PJ K y no K también".
Tres visiones, un mismo fallo
A su turno, Alesandri defendió en soledad su rechazo a la decisión de la Corte Suprema que confirmó la sentencia contra la expresidenta Cristina Kirchner. El parlamentario K afirmó: "Esta afrenta al sistema democrático proscribiendo a la dirigente más importante de nuestro movimiento no hace otra cosa que ratificar que es una condena política, donde se han vulnerado todas las garantías constitucionales y democráticas en nuestro país".
No obstante, su crítica no apuntó al silencio del oficialismo, sino a la oposición cambiemista. Los acusó de “incoherencia e hipocresía” por manifestarse hace un tiempo a favor de una declaración en defensa de la democracia en Venezuela por la proscripción a María Corina Machado y no hacerlo en el caso de Fernández de Kirchner. “Nuevamente el gorilismo es servil para que se lleven la patria puesta, dejando proscripto, en este caso, a la figura más representativa del peronismo a nivel nacional”, sentenció.
En la vereda contraria, Bisotto y Hernández Maqueda promovieron el “beneplácito” por el fallo del máximo tribunal. El liberal abrazado por las “Fuerzas del Cielo” destacó la condena a seis años de prisión y la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos.
Voz oficialista
El jefe de la bancada oficialista salió al cruce de las duras críticas de los cambiemistas, pero no se pronunció respecto a la situación de la dos veces presidenta ante la condena ratificada por la Corte Suprema. "Estamos dispuestos abrir el debate para que digan lo que piensen. Estamos dispuestos a que lleven adelante la discusión. Me pueden explicar ¿por qué motivo siguen con ganas de irse?", retrucó la espada llaryorista ante la amenaza del juecismo, luego concretada, de abandonar la sesión.
Fue tanta la fricción en el arranque del plenario que hubo dos cuartos intermedios para tratar de conciliar posiciones, pero el juecismo redobló su avanzada. "Somos 12 bloques legislativos. Estamos de acuerdo con que todos los bloques pueda expresarse y debatir. Y pese a esto, se quieren retirar, pues me parece que lo que quieren hacer es irse, no debatir", contragolpeó Siciliano en el momento más caliente de la discusión.
El oficialista retomó su dura crítica contra el juecismo (la UCR no le dio margen al PJ porque volvieron a sentarse en sus bancas) al cerrar el debate por el proyecto de ley girado por el Ejecutivo sobre el Convenio de Financiamiento entre el Estado Nacional y la provincia por la deuda de la Caja de Jubilaciones, suscripto el 14 de mayo, que terminó aprobándose por amplia mayoría, aunque faltó el Frente Cívico.
"Los legisladores que responde al senador Luis Juez querían evitar votar este proyecto. Se levantaron de este recinto para no quedar expuestos votando en contra un proyecto que querían votar en contra. Encontraron una excusa para no tener que votar esto", fustigó el titular del bloque PJ.
Al redoblar su embate, Siciliano lanzó: "Yo lamento que los legisladores del Frente Cívico se hayan levantado. Y no hayan estado acá. Con la excusa mentirosa de que no pudieron hablar. Han hablado todo lo que han querido". "Los legisladores de Luis Juez hoy evitaron defender a los jubilados de Córdoba y encontraron -mintiendo- una excusa para no dar el debate que nuestros jubilados necesitan que demos. Hay que defender a Córdoba", cerró.
Deuda por la Caja
En la continuidad de la tumultuosa sesión, la Unicameral ratificó este miércoles el convenio de financiamiento entre la Nación y la Provincia suscripto el 14 de mayo pasado, como lo adelantó Perfil Córdoba en su edición impresa del domingo. Más precisamente, el acuerdo establece que, a través de la istración Nacional de la Seguridad Social (Anses), el Gobierno nacional se dispone a encauzar sus compromisos y resolver el déficit con la Caja de Jubilaciones de Córdoba.
La ratificación por ley se consiguió con los votos del PJ y sus aliados, más el acompañamiento de la UCR, el PRO, el vecinalista Rodrigo Agrelo y los radicales en Construyendo Córdoba (Dante Rossi y Sebastián Peralta). El juecismo estuvo ausente.