Carlos de Angelis analizó el presente y futuro inmediato del peronismo en la rueda informativa del programa "Desde el canil" tras la inhabilitación perpetua que recae desde el martes sobre la líder del PJ, Cristina Kirchner. El analista mencionó que antes del fallo de la Corte Suprema que dejó firma la condena contra la expresidenta en la causa Vialidad, el peronismo iba rumbo a la disolución, pero que tras la sentencia el escenario se volvió más dinámico.
Ejemplificó la falta de rumbo del espacio con el hecho de que en las elecciones del domingo pasado en Misiones no se presentó ni una sola lista peronista. Una señal de alarma para un movimiento que supo ser columna vertebral del sistema político argentino y que hoy parece navegar en una crisis profunda de representación, atravesado por una interna irresuelta.
Según De Angelis, con Cristina Kirchner inhabilitada podrían recrudecer las divisiones en el seno del partido, que viviría una fase crítica que lo empuja hacia la disolución o la fragmentación, con escasas chances de unidad real en el corto plazo, según evaluó. "En la ciudad de Buenos Aires, el peronismo pasó a ser yeta”, mencionó, marcando la pérdida de peso político del movimiento en el distrito de mayor gravitación.
¿Puede Cristina convertirse en la prenda de unidad que necesita el rompecabezas del peronismo nacional?, fue la pregunta que los periodistas del programa que se emite por Bravo TV de lunes a viernes a las 18 formularon con insistencia. El analista opinó que esa posibilidad existe, pero la matizó: “Me gustaría pensar que Cristina puede reunir sectores que no están hoy dentro del peronismo tradicional, cercanos a lo popular, pero que tengan una verdadera voluntad de poder”, expresó.
Luego, ofreció una hipótesis que se recortó sobre el escenario conocido: hizo mención a que tanto Alicia como Máximo Kirchner podrían figurar en la lista peronista de la Tercera Sección Electoral para disputar las elecciones legislativas bonaerenses del 7 de septiembre. Con la conjetura, el analista apuntó a una suerte de continuidad simbólica que Cristina podría querer impulsar.
Precisamente, tanto la hermana del extinto expresidente Néstor Kirchner como su hijo flanquearon a CFK el martes en su discurso ante la militancia, brindado en la puerta del edificio del Partido Justicialista instantes después de confirmado el fallo del máximo tribunal.
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Otro actor central en esta etapa de reconfiguración es Axel Kicillof, quien, a pesar de ser señalado como heredero natural del liderazgo K, nunca aceptó un esquema de coordinación integral con el resto del movimiento. Su postura fue la de marcar independencia, lo que tensiona aún más los intentos de reorganización partidaria.
Para De Angelis, el dilema actual no pasa solo por nombres o cargos, sino por una discusión profunda de programas y proyectos. La reconstrucción no debería ser solo electoral sino ideológica, y debería partir de reconocer el desgaste que sufre el relato clásico del peronismo ante una sociedad cambiante y desencantada.
Lo que está claro, según el analista, es que el peronismo ya no puede darse el lujo de seguir postergando definiciones. La ausencia de listas, la pérdida de territorios y el vacío de liderazgo hacen que el 2025 sea un año importante, según se evaluó en el programa.
BR / FPT
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