Un grupo de militantes encapuchados irrumpió este martes en la sede de Artear —donde funcionan las señales TN y El Trece— y provocó destrozos en distintos sectores del edificio. El hecho ocurrió pocas horas después de que la Corte Suprema confirmara la condena contra Cristina Kirchner en la causa Vialidad.
Los atacantes ingresaron con palos, rompieron ventanales, puertas de vidrio, y también dañaron vehículos (de Marcelo Bonelli, el consultor Jorge Giacobbe y Margarita Stolbizer), bicicletas y pertenencias de empleados del canal. En el interior del edificio se registraron trofeos rotos, como los Martín Fierro, y equipos técnicos destruidos. El hecho tuvo lugar en el barrio de Constitución, a pocas cuadras del domicilio de la expresidenta.
El periodista Jonatan Viale, que estaba al aire en ese momento, relató lo sucedido en vivo y apuntó a militantes de La Cámpora como supuestos responsables. "Se metieron 50 metros dentro del canal, rompieron todo. Las bicicletas de los laburantes, los trofeos… ¿con qué necesidad?", expresó.
A pesar de que en su discurso frente a la militancia Cristina Kirchner apuntó contra Mauricio Macri, la Justicia y su sometimiento "a mandos naturales muy por arriba de ellos", su discurso fue moderado, no incendiario ni provocador. Lejos de llamar a los destrozos, convocó a los sectores populares a organizarse para presentar una “alternativa” al Gobierno de Javier Milei.
Desconcierto y tensión en el canal televisivo
El desborde del grupo de manifestantes fue registrado por las cámaras de seguridad del edificio, así como por imágenes difundidas por el propio medio. En ellas se observa el mobiliario destruido, televisores destrozados y objetos personales dañados en el hall central. En las cercanías del domicilio de Cristina Kirchner, se congregaban simpatizantes que expresaban su respaldo. Desde el canal informaron que los agresores sortearon los dispositivos de seguridad y alcanzaron zonas internas del edificio, donde se produjeron los destrozos más graves.
Trabajadores de TN denunciaron que algunos empleados fueron agredidos y que también se dañaron vehículos y bicicletas dentro del predio. La irrupción provocó momentos de desconcierto y tensión entre quienes se encontraban al aire.
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El episodio violento coincidió con el arribo de CFK a su vivienda, tras participar de una reunión con referentes del oficialismo en la sede nacional del Partido Justicialista. Allí recibió el fallo de la Corte Suprema, que rechazó los recursos de su defensa y dejó firme la condena a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos por istración fraudulenta.
Al llegar a su domicilio, ubicado en el barrio porteño de Constitución, la expresidenta salió al balcón junto a su hijo, Máximo Kirchner, para saludar a los militantes que se encontraban en vigilia desde horas antes. La zona se mantuvo cercada y con fuerte presencia de manifestantes durante toda la tarde.
La exmandataria fue condenada por el delito de istración fraudulenta en la causa Vialidad, que investigó presuntas irregularidades en la adjudicación de obra pública en la provincia de Santa Cruz.
Reacciones cruzadas y silencio oficial
Desde el oficialismo, las respuestas al fallo apuntaron a denunciar lo que consideran una maniobra de persecución política. El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, sostuvo que se trató de “una auténtica infamia” y acusó al Poder Judicial, a Mauricio Macri y al presidente Javier Milei de utilizar la justicia como herramienta de disciplinamiento político y social.
No obstante, el ataque a la sede de TN generó preocupación por el aumento de hechos violentos vinculados a la militancia. Hasta el momento, no se conocieron condenas públicas por parte de referentes del kirchnerismo respecto a lo ocurrido en el canal. Desde la oposición, distintas voces repudiaron el hecho y advirtieron sobre el riesgo para la libertad de prensa. TN emitió un comunicado donde exigió garantías de seguridad para sus trabajadores y calificó el episodio como “un acto de violencia inisible en democracia”.
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