El microsatélite argentino denominado como “Atenea” participará en el desarrollo de la misión Artemis II de la NASA que consistirá en la realización de un sobrevuelo de la Luna y llevará a cabo una labor de medición de datos. El instrumento espacial de fabricación nacional volará a bordo de la nave Orion. El dispositivo, utilizará es solares para propulsarse en el espacio y también captará señales GPS en órbitas de transferencia geoestacionaria.
El dispositivo fue desarrollado por un acuerdo entre la Comisión Nacional de Actividades Aeroespaciales (CONAE) y la istración Nacional de Aeronáutica y el Espacio en el marco del programa SARE.
La UNSAM será parte de la histórica misión Artemis II: tecnología argentina rumbo a la Luna
El proyecto Atenea se concretó a través de una labor académica conjunta en la que se involucraron la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM), la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Buenos Aires (FIUBA), el Instituto Argentino de Radioastronomía (IAR), la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y la empresa estatal VENG S.A.

El director ejecutivo y técnico de la CONAE, Raúl Kulichevsky, subrayó que “el programa Artemis es una misión estratégica de la NASA y, en particular, el lanzamiento de Artemisa II, con personas a bordo, requiere estándares de calidad y confiabilidad muy exigentes”.
Además, Kulichevsky destacó: “Haber sido seleccionados demuestra que nuestras capacidades técnicas y operativas están al más alto nivel internacional”.
Características del microsatélite Atenea y cuál será su función durante la misión de la NASA
El microsatélite Atenea tiene una dimensión de 30x20x20 centímetros y un peso aproximado de 11 kilos. Se encuentra equipado con sensores e instrumentos de medición de alta tecnología.

Entre sus funciones principales, durante la misión Artemis II, se distinguirán la medición de la radiación en órbitas profundas y pondrá a prueba componentes comerciales adaptados para uso espacial, aportando datos clave para futuras misiones al espacio.
Para su construcción se realizaron pruebas de simulación en la Universidad Nacional de San Martín, que cuenta con una mesa vibratoria y una cámara de termo vacío que permite recrear el ambiente sin gravedad del espacio.
PM/EM